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LA RAÍZ AB

LA RAÍZ “AB”.-

 

 

Introducción

Las raíces antiguas parten de los mismos fonemas, especialmente los fonemas más sencillos o fundamentales, que en si mismos tienen un significado claro, sobre una realidad vital, fundamental. Esto no es reconocido por la lingüística oficial, aunque lo que afirmo es un hecho fácilmente verificable, ya no por especialistas en lingüística sino por los mismos hablantes de una lengua, con suficiente criterio y riqueza verbal.

Aunque en otros escritos he abundado en esta significación elemental, básica, fundamental, vuelvo a hacer un pequeño resumen del cuadro fonético básico, con significación semántica diferenciada. Se trata de 4 vocales y 8 consonantes, de las cuales 4 son oclusiva y otras 4 continuas. Paso a explicar sus significados:

 

Significación de los fonemas básicos.-

/a/ abierto, grande, exterior

/i/ pequeño, interior, cerrado

/o-u/ lo propio, lo individual, lo único

/e/ la frontera, la limitación, la pared

 

/b/ la separación

/k/ la extracción, el hacer, la generación

/t/ lo que sobresale, lo se sale de…

/tS/ el depósito, lo acumulado, asentado

 

/n/ la materia, el contenido

/r/ el correr, la extensión

/s/ el salir, el nacer, surgimiento

/l/ el lado, la manera, la faceta

 

 

La raíz compuesta /a/ + /b/ = ab

La vocal “a” más la consonante “b” es una raíz que todos conocemos como prefijo “ab-“ (ab-dicar, ab-cisa, ab-solver,…) y la forma de leer sus contenidos semánticos seria dando el valor de determinante al primer fonema (a), y de núcleo al segundo, tal y como se construyen los sintagmas nominales en el inglés o en el griego. Así “ab” significaría: la separación (b) del exterior (a).

Es necesarios hacer un apunte para las variantes de “b”, es decir, las labiales como “v”, “f”, “p”, “w”, “u”, ya que no por ser diferentes a nuestros lingüistas, al dia de hoy, tendría ningún sentido diferente en la época que se construyó la primera lengua, la lengua primigenia, siendo todas ellas variantes nada más, con el mismo significado conceptual.

Como el hecho de que algo se separe de fuera, o hacia fuera, ya que el matiz puede ser dual, hace que este significado se pueda aplicar a gran cantidad de situaciones y cosas. Se aplica a la “ave” por ser un animal que se separa fácilmente del suelo al echar a volar, como se aplica a “abuelo” por ser el pariente que cada vez se aleja más de las nuevas generaciones, y se va separando de la punta de la vida que es el nacimiento, como también a tantas y tantas cosas, con el “avanzar”, que es separarse hacia el exterior con respecto del que va delante (-an-).

Esta raíz “ab” la encontramos en gran cantidad de lenguas, no solo las latinas, pero esta vez, visto el interés por dominar una lengua hoy considerada internacional, pero con fuertes raíces anglosajonas y muy poco latinas, nos puede servir para ver su universalidad, que la hace aplicable a lenguas antiguas desde el punto de vista evolutivo como pueden ser el vasco o el ibero.

 

Léxico inglés y raíz “ab”

 

 

 

 

Aback

Desconcierto

 

 

Abandon

Abandonar

 

 

Abdicate

Abdicar

 

 

Abduet

Secuestras

 

 

Ability

Habilidad

 

 

Abject

Miserable

 

 

Abolish

Suprimir

 

 

Aborigen

Aborigen

 

 

Abort

Abortar

 

 

About

Más o menos

 

 

Above

Encima

 

 

Abrasive

Abrasivo

 

 

Abreast

Delante, enfrente

 

 

Abroad

Al extranjero

 

 

Abrupt

Brusco

 

 

Absces

Abceso

 

 

Abscond

Fugarse

 

 

Absolute

Absoluto

 

 

Absolve

Absolver

 

 

Abstain

Abstenerse

 

 

Abstract

Abstracto

 

 

Absurd

Absurdo

 

 

Abundance

Abundancia

 

 

Abuse

Insulto

 

 

Abysmal

Pésimo

 

 

Abys

Abismo

 

 

Affluence

Opulencia

 

 

Afford

Proporcionar

 

 

Afield

Lejos

 

 

Afloat

A flote

 

 

Afraid

Tener miedo

 

 

Afresh

De nuevo

 

 

After

Después de

 

 

Apart

A parte

 

 

Ape

Mono, imitar, apañar

 

 

Aperitif

Aperitivo

 

 

Aperture

Grieta

 

 

Apex

Ápice

 

 

Apologize

Disculparse

 

 

Appal

Espantar

 

 

Apparel

Ropa

 

 

Apparent

Aparente

 

 

Appeal

Apelar

 

 

Appendix

Apéndice

Pen + dis

Ap +

Appetite

Apetito

Eat

Ap +

Applaud

Aplaudir

Lab + d

Ap +

Apple

Manzana

Bil

Ap +

Application

Aplicación

Bil + ka + tz + on

Ap +

Appoint

Nombrar

On + t

Ap +

Appreciation

Apreciación

Et + i + tz + on

Ap +

Apprehensive

Aprensivo

Er + en + tz + iv

Ap +

Apprentice

Aprendiz

Er + en + dis

Ap +

Approach

Acercarse

Er + o + ke

Ap +

Appropiate

Apopiarse

Er + op + tze

Ap +

Approve

Aprobar

Er + op

Ap +

Appril

Abril

Er + il

Ap +

Approximate

Aproximadamente

Er + o + ke + im + tz

Ap +

Apron

Delantal

Run

Ap +

Apt

Apropiado

Tz

Ap +

Auburn

Castaño osucro

Bur + n

Au +

Auction

Subhasta

Ke + tz + on

Au +

Augment

Aumento

Ke + men + tz

Au +

Augur

Augur

Gur

Au +

Austral

Austral

Tz + ter + al

Au +

Author

Autor

Ke + tor

Au +

Auto

Auto, coche

Ke + tz

Au +

Auxiliary

Auxiliar

 

 

Avail

Aprovechar

 

 

Avalanche

Alud

 

 

Avant-garde

Vanguardia

 

 

Avenge

Vengar

 

 

Avenue

Avenida

 

 

Average

Promedio

 

 

Averse1

Aversión

 

 

Avert

Prevenir

 

 

Avoid

Evitar

 

 

Await

Esperar

 

 

Awake

Despertar

 

 

Award

Consciente

 

 

Away

Fuera

 

 

Awe

Admiración

 

 

Awful

Horroroso

 

 

Awkward

Desmañado

 

 

Awning

Caravana

 

 

Awry

Mal colocado

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Puntualizaciones

En principio, para los castellanoparlante muchas palabras serán fáciles de entender y de aplicar el prefijo “ab” a la significación total de la palabra. La mayoría necesitan de la explicación de las otras raíces que forman parte de la palabra. Algunas son tan simples que no necesitan casi de ninguna explicación, como por ejemplo “ap.to”, donde solo lleva un segundo morfema “-to” que proviene del verbo “ser” (tz, que en esta aplicación como participio lo hace en “-to”).

Los parlantes ingleses verán que muchas palabras consideradas del léxico estrictamente anglosajón también son muy evidentes en su simplicidad, como por ejemplo “awe”, ‘admiración’, donde la separación hacia el exterior es evidente en el hecho de admirar.

Creo que la abundancia de palabras no es una simple copia de todas las que se inician con este prefijo, sino solo aquellas que pueden tener una explicación en base a esta raíz “ab”. Algunas palabras pueden ser compuesto de la preposición “a” más una palabra que comience por “b”, “v” o “p”. En otros casos no he añadido palabras que podrían derivarse de esta raíz “ab” pero que debieron perder la vocal inicial, cosa que a veces pasa y podemos observar en casos como “abedul”, que en catalán ha perdido la “a-“ inicial: “bedoll”.

 

 

Colofón inglés

Como he escrito antes hay palabras que su evolución fonética no nos permite localizarlas tan fácilmente como en las apuntadas en el cuadro. Muchas veces se ha perdido la vocal inicial y la “b” inicial parece también evolucionar a otros fonemas derivados, como, en el caso que paso a describir, la “u”. Es un hecho frecuente por lo que dentro de las variantes de la raíz “ab” propongo también “au”, la mayor parte de las veces resultante de la sonorización de la “b” > “v” > “u”. Lo que me guía en estos casos es su significado. Es lo que creo que me lleva a detectar en la palabra inglesa “out”, ‘fuera’, tan conocida y utilizada en compuestos, una derivación de la raíz “ab”. En este caso lleva pospuesto la raíz “t” del verbo “ser”. En un principio debería haber sido “abt”, difícil de pronunciar, y en seguida debió evolucionar a “aut”, sonido exacto al que hoy tenemos para “out”, aunque escrito ya no con “a” sino con “o”, una variación ortográfica que no entiende en muchos casos de etimologías ni de evoluciones semánticas. Su significado es claro: ‘es fuera, separado a l’exterior’.

No solo afecta “ab” a “out” sino también a la palabra “up”, pronunciada casi como “ap”. La evolución fonética para esta palabra debio ser: auv, con pérdida de la vocal inicial, cosa que no pasa en su homónima vasca “aupa”, ‘arriba’, así como nuestras palabras castellanas “aupar” y “aupi”. Puede que la evolución de “b” fuera hacia “uv” y esta “v”, al estar en final de palabra derivara a “p”. Es algo parecido a lo que le debió pasar a “over”, con un sufijo de adjetivo posesivo “-er”. “Auv” debió continuar su evolución hacia “ov-“, más el sufijo muy habitual “-er” con el sentido de posesión. Por lo tanto “over”, además de ‘encima’ significa aquello que acaba, que se pierde por separación.

Esta evolución fonética es similar a “aperio”, en latín ‘abrir’, que dio el castellano “abrir”, pero que en catalán evolucionó a un dialectal “aubrir” y un final “obrir”, semejante al francés “ouvrir”, y el inglés, acabó evolucionando a “open”. Por lo tanto encontramos casi todas las labiales en una evolución nada estraña.

 

 

Un caso para el vasco

Una de las cuantiosas palabras donde creo que el vasco contiene la raíz “ab”. Se trata de la palabra “abar”, ‘rama’, que muchos estudiosos iberos relacionan con el nombre de ‘diez’: “amar”, que por evolución fonética paso de “abbar” a “amar”. De hecho comparar las ramas con los dedos es algo fáicl y natural. De hecho “ab” es separarse y los dedos realmente se separan de la mano, y lo hacen en este número de diez, que se alimenta, pues, en esta raíz más la raíz “-ar”, ‘extensión’, o quizás un morfema tipo artículo determinado. Otras palabras relacionadas con “ab” son “abaro”, ‘umbria’, “abarka”, una derivada de “abar”, ja que se construían este “alpargatas” con la corteza de algunos árboles.

Respecto a “abar” hay que mencionar derivados en nuestras palabras castellanas como son: además de “abarcas”, “rama” y “parra”, que en un origen debieron ser “·aparrama”, de la que derivan ambas palabras. En catalán tenemos el nombre de la “zarza” que es “esbarzer” o “abarzer”, una planta con muchas ramas finas llenas de pinchos. Y también el nombre de tres árboles: el avellano, que según la Real Academia deriva de un pueblo italiano denominado “Abella”. Una explicación nada convincente para un árbol que debía estar extendido por todo el continente, aparte de que aquí tenemos también pueblos con este nombre. Otro árbol es el “abeto”, también siguiendo a la Real Academia deriva de “abies”, pero con un derivado reconstruido (que no certificado en escritos) *abete o *abiete, sin señalar la razón de este añadido sufijo. Por último tenemos el “abedul”, “bedoll” en catalán, derivado de un reconstruido latín *betule, que algunos relacionan con un celta “betu”. Habría que explicar por qué de una palabra sin “a-“ inicial el castellano si la tiene. Es un fenómeno no explicable, pero si lo fuera si realmente el origen fuera “ab-edul” y no el latino “betullu”.

 

Epílogo

Las ansias de haber localizado una raíz antigua siempre nos puede llevar a exagerar su alcance, y a hacer derivar más palabras de las que lo son en realidad de esta raíz. Pero dicen que cuando el rio suena agua lleva, y realmente la raí “ab” tiene una presencia innegable en muchas lenguas, y no sería menos en el ibero, que como he mencionado tiene en “abar” el nombre del número diez, y quizás de otras manifestaciones homónimas como podría ser el “árbol” que en catalán, aunque se escribe “arbre” se pronuncia “abre”, quizás contracción de un antiguo “abare”. Queda, pues, este trabajo para su confirmación o rectificación si es que así creéis más conveniente.

 

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